Puedo decirles que hoy es cierto que me siento yo, que me siento en una silla y siento, que más allá de esto soy y que lejos de pertenecerme, me pertenezco.
Vaya tarde… cierro un libro, abro un bostezo.
En mí despiertan todas las dudas que no has sabido apaciguar. En mí se clavan los reclamos, en mi carne se entierran los por qué y los hasta cuándo, de mi boca florecen los silencios imperdonables.
En mí se hace el día y la soledad.
Como preparar café, las ideas hierven, las azucaro, las bebo, las olvido. ¡Maldita sea, cómo adoro comer estas galletas!
Sucede que hay días en los que como hoy, me veo en vísperas de un aniversario (camino a los tres años), me veo a días de volver a la Facultad de Medicina para enfrentar todo aquello que aún me resta por aprender... Pero mientras todo llega, todo se toma su tiempo, yo sigo en mi ventana, añorando otras ventanas y comiendo Spekulatius (Spéculoos o Speculaas, en Bélgica).
Digo Spekulatius porque las que estoy devorando son traídas de Deutschland...
Una catársis con sabor a canela,
Belén
1 comentario:
Si consideras; el inmediato, sigue teniendo notificación de espera.
No busques, tapar lo que sientes tras algo físico y no lamentes que hayan terminado los días de inusual descanso.
A veces pasa (como decimos tantas veces); pasa que nada detiene su ritmo y por más apresurado que busques que sea, de una u otra forma, te lo va cobrar. Y pasará de la misma forma; despacio.
Trata de disfrutar más la lluvia Mi Pequeña y sentir, que todo plazo se cumple y lo mejor es fluir en él.
Un fuerte abrazo,
Mi Leona, que mañana el almuerzo nos espera y sabremos que otro plazo se ha cumplido y sucederá que a veces, que requerimos nada más que el silencio.
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