miércoles, marzo 27, 2013

HIPOMANÍAS E INTERNADO

Quienes tenemos una personalidad con fases tan atractivas como yo (llámese "hipomanía") tendemos a crear, con relativa frecuencia, miles de proyectos que quedan muchas veces inconclusos. Sin embargo, llevo ya 24 años y medio con esta condición y he aprendido a manejar de tal modo mi fase hipomaníaca que, sinceramente, mis proyectos nunca han quedado a medio hacer.

He dejado un tiempo el blog, es verdad, pero es que he tenido demasiadas cosas que hacer y organizar.
Aún no he terminado de comentar la segunda parte de mis vacaciones y ya ha llegado mi Internado Rotativo.
Oficialmente desde el día lunes empiezo a trabajar en la institución que más comodidad y familiaridad me ha brindado... pero como es de esperarse, esta semana fue la de introducción a lo que será el siguiente año de mi vida.

Culpo directamente a mi bipolaridad por el humor con que me hallo: estoy absolutamente feliz, emocionada y llena de unas ganas que desconozco de dónde han salido.

Lo cierto es que tengo ya tantos planes en la cabeza que me asusta la idea de pensar que todos los cumpliré y que, incluso, con el tiempo iré sumando rayas al tigre.

Así que nada, por lo pronto solo adelanto en esta bitácora de Internado que mi primer servicio es Ginecología y Obstetricia, durante 5 semanas... y luego me veré de nuevo en la primera línea de guerra: Emergencias.
En algún punto de este año, si todo salió como intenté, estaré rotando por el área de Terapia del dolor y Cuidados Paliativos... y enfrentaré a la muerte, mano a mano, como en otros tiempos. Esa fue mi rotación optativa... y la escogí en buena parte porque el servicio de Siquiatría no me ofrecía lo que yo buscaba y porque mi futuro esposo, al estar tan obstinado con la Oncología, necesitará refuerzos y yo le prometí estar a su lado en todo. 


Un abrazo a todos... en este instante la migraña me mata... pero estoy feliz, vaya que lo estoy. Mi vida retoma una fuerza impresionante... y necesitaba manifestarme por aquí.