lunes, abril 20, 2020

5 / CoVid19

LA GRANDILOCURA Y LA GRANDILOCUENCIA

He de decir que hasta esos días mi pensamiento seguía siendo el mismo.
Esto es una gripe más, un cuadro infeccioso como cada década nos alcanza, nos infecta, muta, asusta y a la final o acabamos haciéndonos inmunes, o aparece la vacuna o nos acostumbramos a que, como toda patología infecciosa, afectará a unos de forma más grave y a otros de forma más leve.

Mi hermano estaba preso en la notificación instantánea de los casos, de las defunciones. Yo, aunque todavía soy parte de la generación que creció con la tecnología, la verdad es que no termino por engancharme como la juventud de hoy... y me alegro porque me generaría más agotamiento mental del que podría manejar.

------
Sinceramente (y aquí empieza a brotar la rama de "soy médico en tiempos de pandemia") creo que el manejo de esta crisis ha sido desproporcionado en lo que respecta a la parte mediática. Los medios de comunicación han sido alarmistas al punto de enfermizos y eso, desde luego, nunca acaba por ser útil.

Las críticas de mi hermano hacia mi actitud eran justificadas dentro de su realidad. Mi postura un poco "relajada" hacía que él montase en enfados porque "no me tomaba en serio las cosas"...

A ver. Si nos ponen en tiempo real las cifras de los muertos por accidentes de tráfico, suicidios, complicaciones cardiovasculares, hambre... nos volveríamos locos todos. Y es que a la gente se le ha olvidado que parte de la salud es también la salud MENTAL. Las medidas de HIGIENE MENTAL no son eufemismos que acaban de ser inventados, es algo que hace rato busca tener más protagonismo pero que, entre Instagram y las publicaciones de Facebook tipo "La ciencia lo demuestra, decir groserías te hace más inteligente"...
...

...
...
La gente no entiende. Vivimos en un mundo donde estamos aferrados a una pantallita y creemos que eso es LA VENTANA A LA REALIDAD.
La cantidad de información, de historias, de verdades y mentiras, es abrumadora y hay gente dispuesta a sacrificar su tiempo en leer o intentar leerlo todo. Eso no te da mucha opción a considerar un "filtro" mental para abarcar la verdadera realidad... No sé, solo digo.

Si mi postura frente a una pandemia, desde mi sitio como médico es esta (júzgueme con confianza EXCLUSIVAMENTE QUIEN ME CONOZCA) es porque no me termino de creer que esto sea el fin del mundo. 

- Sí una crisis global.
- Sí una crisis sanitaria porque nadie lo vio venir y como no estábamos preparados la idea de "no morir en el intento" por parte de la salud pública y privada era lo más sensato...
- Sí una crisis económica con unos tintes políticos que resaltan de formas DEMASIADO obvias...
- Sí, si quieren, una llamada de parte del Planeta Tierra diciendo "Buenas ¿ha escuchado hablar de la extinción? jaja... 

No me alarmo. Me quejo, pero no me alarmo. 
La vida existió antes del ser humano y seguirá existiendo después de él. Biológicamente no entiendo el antropocentrismo ni esa necesidad malsana de creer que nos merecemos vidas longevas y hasta eternas.
¿Para qué?
------
Volviendo a lo que vivía... 



De todas formas, los tickets para museos y medios de transporte ya estaban comprados. Y con las diferencias sobre el manejo de emociones en días de lo que aún era epidemia, el cronograma de actividades no había cambiado.

Lo único que había diferente era un cierto picor de garganta que usualmente no es lo que me suele pasar cuando tengo alguna infección de vías respiratorias...

Mi hermano había comprado cosas típicas y deliciosas de la región, yo llevaba un Brunello para festejar... y así, la primera noche en Bolzano fue amena, con guitarra y saludos a la familia... Le di los regalos que le había comprado e incluso le di más regalos de los que esperaba darle jaja...

Italia era nuestra y esos casos que había en ciertas regiones pues sí, daban para el debate y la reflexión... pero aún estaba todo muy distante en nuestras mentes...

No hay comentarios: